Colaboración de Paco Pérez
Capítulo I
Hay
quienes pronuncian las palabras LIBERTAD
y RESPETO cuando están subidos en un
estrado, un blogs puede llegar a serlo y la persona que lo administra usarlo
como tal, y cuando lo hacen procuran usarlas con tanta energía que dan la
sensación de haberlas inventado ellos. Se comportan así quienes intentan llegar
al poder como sea, recurren a ese método para confundir las mentes de quienes
les escuchan y para poder ganarse así sus voluntades, tenemos el ejemplo
doloroso y sangrante de la historia actual de Cuba.
Una
vez alcanzado el objetivo e instalados en el mando, el pueblo embaucado ya
pierde todo lo bonito que encierran y significan esas palabras y, de pronto, pasa
a no pueden opinar y a tener confiscadas sus propiedades; teniendo que aceptar,
por las buenas o por las bravas, el nuevo estado de bienestar que les regala el
pensamiento impuesto.
¿Por qué comienzo así?
Porque
vamos a presentar un tema capitulado en el que tendremos que poner en marcha, a
nivel personal, los principios que rigieron la tertulia donde se introdujo el
tema y que nos empujaron a presentarlo. Es necesario que leáis sin pasión la
información y entonces, de hacerlo así, cada cual podrá sacar sus conclusiones
sin dejarse influenciar por los del estrado pero aceptando siempre que los demás
vean el tema con otras gafas o posibilidades.
La
INFORMACIÓN motivadora:
En
el mes de diciembre, en la tertulia del café, se comentaron unos hechos que habían sucedido en Valladolid entre abril y junio de 2014,
de ahí que unos meses después el diario de esta ciudad los sacara a luz pública
en primicia informativa. Parece ser que una joven había recibido algunas
sesiones de “Exorcismo”, por un
clérigo católico experto en ese tema, a petición de los padres y con la
autorización del Arzobispo de la Diócesis de Burgos. Una vez en casa decidí actualizarme
en el tema y así fue como entré en contacto, gracias a Internet, con dos blogs:
1.-
El administrado por Luís Alfonso Gámez
y de nombre “MAGONIA”. Un clic en LEER.
2.-
El de Vicente Baos, con un nombre
muy original, “EL SUPOSITORIO”. Un
clic en LEER.
Hoy,
por fin, puedo mostrarles a ustedes aquellos hechos y lo hago a petición de uno
de los tertulianos.
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