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lunes, 11 de enero de 2016

UNAMUNO Y LA EVOLUCIÓN DEL PENSAMIENTO POLÍTICO

Colaboración de Paco Pérez

D. Miguel de Unamuno fue un ilustre escritor que, con su ejemplo, nos enseñó cómo se puede evolucionar en el pensamiento político cuando la ideología que nos embarcó en la ilusión se desvía y entonces comprendemos que no cumple los principios que nos llevaron a darle el apoyo. Él, cuando vivió esa experiencia, comprendió que allí no estaba su lugar de lucha. Sigamos los rastros de lo que hizo para descubrir su evolución:
En 1931 se presentó a las elecciones municipales en una candidatura de coalición, republicana-socialista, y fue elegido. Unos años después, el día 26 de septiembre de 1936 y en nombre de la Universidad de Salamanca porque era el rector, firmó una proclama de protesta contra las atrocidades que se atribuían en aquellas fechas a los republicanos.

Unos días después, el 12 de octubre de 1936, se celebró en el paraninfo de dicha universidad el “Día de la Raza”, aniversario del descubrimiento de América por Colón. En dicho acto estuvo presente Millán Astray escoltado por un grupo de legionarios que iban armados con metralletas. Varios oradores soltaron en sus discursos los típicos tópicos que se usaban entonces para ensalzar al “régimen franquista”. Unamuno mantuvo, durante las intervenciones de los oradores una actitud sana y digna de elogio, tomaba notas de los discursos que se pronunciaban, pues no tenía la intención de intervenir. Pero, a medida que fue avanzando el acto, D. Miguel se indignó cada vez más con lo que iban diciendo quienes intervenían y, cuando ya no pudo aguantar, subió al estrado y pronunció un improvisado y apasionado discurso. Tomo prestados de él unos párrafos: [“... Vencer no es convencer, y hay que convencer, sobre todo, y no puede convencer el odio que no deja lugar para la compasión...”.].
Estas palabras, fiel reflejo de su personalidad, iban dirigidas a los aduladores del régimen al que él había ayudado con una donación económica salida de sus ahorros. Lo hizo porque consideró que al hacerlo ayudaba a una causa mejor que la que había defendido antes. A pesar de ello, sentado y escuchando a los aduladores, comprendió que los que vendrían después no arreglarían los problemas de España y que ningún bando contendiente había merecido ni merecía su apoyo.
¿Hemos sido valientes, como D. Miguel, para comprender el 20 D qué necesitaba España y regalárselo con nuestro voto o sólo fuimos unos sectarios votantes que únicamente nos preocupamos ese día de mirar hacia nuestro ombligo?
Podremos seguir arrancándole al calendario las hojas cuando dejen de sernos útiles, después arrojarlas a la papelera por inservibles y, finalmente, llevarlas al contenedor de papel para su reciclado. Esta acción no nos cuesta esfuerzo realizarla porque dejarlas donde estaban nos entorpecerían más adelante, luego… ¿Por qué no aplicamos la táctica del calendario con quienes dirigen nuestras instituciones públicas, malgastan nuestro dinero o lo roban, no dimiten a pesar de ello y, además, se aferran al sillón para disfrutar del beneficio que les concede su condición de aforados para conseguir que no los encierren entre rejas?
Procedemos así porque no tenemos la claridad de ideas de D. Miguel y, si la tenemos, carecemos de su valentía y altura de miras para decir en público lo que pensamos.
España estaba muy mal, la crisis no ha tocado fondo, el PP ha enderezado algo lo que el PSOE dislocó… ¿No nos creemos esa realidad? Pues el 20 D España necesitaba una mayoría absoluta para seguir creciendo en esa línea porque las experiencias de Grecia nos enseñaron el camino que no debíamos tomar, apoyar a los embaucadores… ¡¡¡Los que prometen cosas que no se pueden hacer cuando llegan al gobierno, el caso de Podemos, aprovechándose del dolor y de la incultura que ellos mismos crearon y alimentaron!!!
Por dejarnos llevar y no meditar, ahora padecemos en España la consecuencia que nos puede llevar a la destrucción económica y social, la postura egoísta de Arturo Mas ya se lo ha tragado y Pedro Sánchez sigue en sus trece. Puede ocurrirle también porque antepone su ego al bien general de los españoles, y por ello no acepta más planteamientos que el suyo, el comportamiento que manifiesta es porque no quiere perder la posición política que ahora tiene.
Con el paso de los años, el comportamiento de Unamuno sigue teniendo vigencia y, por consiguiente, es válido para enseñarles a los políticos irresponsables que tomar una postura personal en la vida no es malo y mucho menos vergonzoso, lo lamentable es creernos que nuestro camino es la ÚNICA vía válida para gobernar, la ÚNICA VERDAD y, por lo tanto, la mejor solución para los males colectivos. En general, con las posturas inamovibles no se progresa, debemos tener miras elevadas que nos permitan cambiar de rumbo cuando cometemos los errores. Estos dos señores, lamentablemente, son el ejemplo de que no supieron ponerse a tiempo unas gafas de alta graduación para conducir nuestros destinos, Mas ya está en el lugar que deben ocupar quienes no merecen gobernar.
Éstos no cambiaron de postura pero Unamuno sí lo hizo cada vez que vio claro el camino: Primero apoyó a la izquierda y después se sintió engañado por ella; después pasó a dar su apoyo a Franco (el 20-IX-36) y finalmente, cuando COMPRENDIÓ (el 12-X-36) que no merecía la pena luchar por ninguno de los ideales contendientes, se levantó en el paraninfo para plantar cara al régimen de Franco, no le temió a las metralletas de los legionarios allí presentes y proclamó con fuerza su PENSAMIENTO LIBRE de ataduras políticas diciendo: [“… El general Millán Astray es un inválido… También lo fue Cervantes. Pero los extremos no sirven como norma... Me duele pensar que el general Millán Astray pueda dictar las normas de psicología de las masas. Un inválido que carezca de la grandeza espiritual de Cervantes, que era un hombre; no un superhombre, viril y completo a pesar de sus mutilaciones, un inválido, como dije, que carezca de esa superioridad de espíritu, suele sentirse aliviado viendo como aumenta el número de mutilados alrededor de él... El general Millán Astray quisiera crear una España nueva, creación negativa sin duda, según su propia imagen. Y por ello desearía una España mutilada...”.].
Arturo y Pedro no se parecen a Millán Astray en su invalidez física pero sí guardan un parecido notable en el cacao mental que han mostrado, lo que es mucho más grave. Unamuno les habló de Cervantes como ejemplo a seguir, les demostró así que el estar manco no le impidió ser un gran intelectual y pasar a la posteridad por su genial creatividad, fruto de una mente lúcida. Mas y Sánchez son dos mentes poco lúcidas y, por eso, muy peligrosas para los intereses comunes de los españoles pues sólo han aportado pobreza intelectual al proponer soluciones que los favorezcan a ellos y todo por no querer abandonar el barco a tiempo para salvar lo que es de todos y no de ellos, España y Cataluña. Para qué voy a repetir lo que ya sabemos que pasó ayer.
Los españoles tal vez tengamos que ir de nuevo a las urnas y, si ocurre, tendremos que no equivocarnos de nuevo como hicieron los catalanes, porque ya estamos viendo qué nos ha ocurrido el 20 D por hacerlo demasiado a la ligera.
Podemos nos ha mostrado su modelo incompetente en las alcaldías donde gobiernan, lo han conseguido por el procedimiento legal de “para que no gobierne el PP u otra fuerza mayoritaria”... ¡¡¡Se están aprovechando del déficit general que tenemos en nuestra cuenta de ideales!!!  
Para llegar al poder están usando una receta muy poco sería pero muy efectiva, usan palabritas bellas cuando denuncian lo mal que lo han hecho los demás y, a continuación, sirven a los descontentos presentes y ausentes un plato que es de su agrado, la solución de sus problemas. Son cosas que no se pueden dar pero no les importa mentirles porque saben que ya los han engañado y que quienes están desesperados los seguirán porque mejor no podrán estar con los otros. Estas táctica son infantiles, las aprendieron leyendo a “Caperucita y el lobo” y, como comprobaron de pequeños que el lobo consiguió el objetivo buscado, pues por eso llegaron cubiertos con pieles de cordero y después, cuando consiguieron sus impensables diputados, asomaron sin miedo las garras porque se sintieron fuertes y necesarios para presionar a los desesperados, Mas y Sánchez. Aquel, cuando ha querido percatarse del tema, se ha encontrado de golpe con que se lo han tragado los anarquistas y Sánchez ya se ha subido al autobús… ¡¡¡Si “Podemos” ocupa la Moncloa algún día nos convertirá en seres sin pensamiento propio y de Venezuela importará el modelo de gobierno que tiene pensado imponernos!!!
Esta forma de llegar al poder está en la Ley pero es un golpe de estado encubierto porque se ponen de acuerdo los que pierden para derrotar al que ganó por MAYORÍA y de manera democrática,
El PP ha sido elegido así por los españoles, su modelo de gobierno se ha impuesto por la fuerza de la razón, pensamiento que proclamó  UNAMUNO sin miedo, y no lo ha hecho como esos dirigentes que perdieron y ahora quieren dirigirnos con el apoyo de quienes desean imponerse por la fuerza de las armas políticas que manejan, pactos contra la razón y la paz, lo que Unamuno denunció.
Lo peor de la democracia que tenemos ahora es la masa social que sigue anquilosada en el odio del pasado, la misma que pedía al dictador Franco… ¡¡¡Queremos LIBERTAD!!!
Esa masa social se olvidó ya de los anhelos que le inspiraban sus ideales y, como consecuencia de ello, ahora se comporta con TIRANÍA y OPRESIÓN hacia quienes no piensan en el tema de debate como ellos. Esta es nuestra realidad social-cultural.
Durante la Transición, uno de los anhelos de la izquierda era elevar el nivel cultural del pueblo porque consideraba que Franco había dejado muchos analfabetos y que se aprovechaba de los incultos.
Pues bien… ¿Qué situación tenemos ahora con la Ley de Educación que nos regaló el PESOE?
Muchachos con los estudios de ESO concluidos, títulos que no les sirven para trabajar; otros que no acabaron estos estudios y que son más analfabetos que los de la época criticada. La diferencia con aquellos está en que ahora comen a diario en casa de sus padres, tienen coche y todos los días son de fiesta. Los de estas generaciones no pasaron necesidades y no tienen prisa por responsabilizarse de nada, es decir, son conformistas porque no les aprietan los zapatos y por eso no aprendieron todavía lo que es ser contestatarios, se aposentaron en la incultura de la comodidad y gracias a “nuestro estado del bienestar” ellos “bien están”, con esta cultura los políticos han propiciado que tengamos una sociedad MOLDEABLE y MIOPE. Por eso no quiere el PSOE mejorar el sistema educativo, no le interesa que la fábrica produzca genios y sí que salgan de los centros como hasta ahora, expertos en saber cuándo hay que ir a la oficina del INEM.
D. Miguel de Unamuno acabó su intervención diciendo a los aduladores del “franquismo”: [Venceréis, pero no convenceréis, porque convencer significa persuadir, y para persuadir necesitáis algo que os falta, RAZÓN y DERECHO en la lucha. Me parece inútil pediros que penséis en España.].
Pues eso mismo le digo yo a quienes han iniciado un camino sin retorno: Con Mas ya no pierdo el tiempo, se ha estrellado, y a Sánchez le pillan de lleno las palabras sabias de Unamuno, habrá que esperar un tiempo todavía para ver como acaba su viaje.
España necesita de muchas personas sabias que piensen como, en su día, lo hizo D. Miguel pero, desgraciadamente, está sobrada de personas como Pedro Sánchez… ¿Por qué opino así? Porque éstas son flor de un momento, un día se rodean de la bandera y un mes después no tiene inconveniente en proponer romper el mapa de España si esa acción vergonzosa lo lleva a la Moncloa.
En política interesan las personas de principios perennes y elevados, de ellos podemos esperar buenos resultados, pero de los advenedizos que buscan su interés personal sólo podemos esperar promesas falsas, frases hechas y hecatombe nacional. A las pruebas me remito queridos lectores, aconsejo a los jóvenes que hagan el esfuerzo intelectual de visitar las hemerotecas, ahí encontraréis las pruebas de lo que han hecho ciertos partidos cuando han gobernado y entonces comprobaréis que ser mayores, para este tema, es una ventaja.




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