Colaboración de Paco Pérez
MI “MEMORIA HISTÓRICA”-III
Hace unas fechas afirmé: [“Las ideas antagónicas en que estamos aún anclados nos
demuestran que, por culpa del mal enfoque que se dio a la “Memoria Histórica”, la foto del “blanco y negro” sigue vigente pues cuando creíamos que nos
estábamos alejando del punto de arranque…”.].
La realidad es que han pasado 82 años desde que arrancó el
conflicto bélico pero no han debido ser suficientes para que bastantes
españoles no hayan olvidado todavía sus desgracias familiares. Nos ha ocurrido porque
muchos de nuestros políticos no trabajan para servir al bienestar de la
comunidad sino para que sus actos les rentabilicen a ellos buenos beneficios
electorales. Después, si el modelo erróneo de gestión que aplican ayuda a otros
a mejorar su vida pues la jugada les saldrá redonda porque ellos quedarán
flotando encima, como le ocurre al aceite. Ellos trabajan muy bien el refrán
que mi abuelo repetía con frecuencia: [“Primero yo, después
yo y siempre yo.”].
Como todo lo que hacen va por esa dirección pues, como es
lógico, su actuación enturbia la convivencia, la ciudadanía se cansa de que la
engañen y, cuando comprueba la certeza de sus mentiras, les ocurre lo que no desean… ¡¡¡Les da la espalda, lo que les ha ocurrido
ahora en Andalucía!!!
Cuando tenemos setenta años o más, a “estos pajaretes”
–expresión muy utilizada por Tomas
Castellano “Calderas” cuando
alguien le hacía una faena mala- les vemos el plumero con facilidad si somos independientes pero si somos unos palmeros del montón, en sus mítines o cuando
aparecen en la TV, no veremos nada porque estaremos acostumbrados a que nos
pongan, ya preparados por ellos, los sobre electorales en la boca y, sin
abrirlos, salimos corriendo para no llegar tarde a depositarlos en las urnas.
Por estas razones, y otras muchas, como los años no pasan en
balde para nadie, pues nos permiten pasarles el filtro y se encuentran
atrapados porque entonces sólo cuela por él lo pequeño pero lo gordo no y eso les
ocasiona atranques irresolubles.
Eso mismo me ha ocurrido con la “Memoria Histórica” pues he comprobado que es innecesaria, injusta, oportunista… Por ello, cansado de
escuchar y leer el uso que están haciendo de ella, tomo prestada aquella frase
de mi abuelo Paco para decirles: [“Ya ha llegado el carro a la posá”.].
Estoy tan cansado de su escenificación mediática que he
decido “RECLAMARLES LOS DERECHOS DE MI
FAMILIA” mostrándoles el relato de nuestra “Memoria Histórica”, la que afectó a nuestra familia materna, y de la que nunca nos hemos
quejado sus descendientes. Lo hago para mostrar a los lectores las pruebas de lo
injustos que son nuestros políticos, en este caso los de izquierdas, cuando recurren
a ella de manera puntual e interesada para, hurgando en el dolor de los demás, intentar con los recuerdos sacar ventaja
electoral a la derecha.
Mi abuelo materno se llamaba Cayetano López Pérez, trabajó de comerciante, un día se ennovió y
un tiempo después se casó con Rosa Antonia
Martos Mendoza, de profesión S L. La
abuela era unos cuantos años más joven que él.
Después de pasar por el altar trabajaron los dos mucho,
tenían poco descanso y un horario de apertura y cierre que iba desde el
amanecer hasta las veinticuatro horas, con un leve descanso para almorzar. Él
era el sostén del negocio y ella el de la casa pero ampliaba su jornada laboral
como ama de casa ayudándole en la tienda cuando acababa las faenas del hogar y los
cuidados que necesitaba la crianza de sus cinco hijos, dos murieron muy
pequeños. Su hija mayor es mi madre, Magdalena
López Martos, nació en 1924 y aún vive; Pascual nació en 1927 y murió con 35 años y Juan, que va a cumplir los 88, todavía va con el “Land Rover Santana” de un lado para otro.
Nos contó mi madre que, cuando sus padres se casaron, había
en el pueblo una pobreza grande y que por esa razón, ellos y todos los novios
de entonces, no iban de viaje de bodas pero sus padres hicieron una excepción y
lo cambiaron por un viaje de trabajo hasta Torredelcampo
(Jaén), lo hicieron arrastrados por las
penurias económicas de aquellos tiempos y las necesidades del trabajo. Parece
ser que el abuelo tenía en ese pueblo un amigo de la mili que se dedicaba a la
crianza de los cerdos, entró en contacto telefónico con él y le propuso a la
abuela ir a visitarlo. El viaje no era de placer sino para intentar comprarle
una partida de cerdos y pagársela a plazos si él aceptaba. Consiguieron el
objetivo, regresaron con los cerdos y comenzaron a realizar las matanzas y a
vender los productos resultantes de ella en la tienda.
Creo que, partiendo de esa realidad, ya nos podemos imaginar
con qué posibilidades económicas partieron al casarse, qué no tuvieron que
trabajar y lo que debió sufrir mi abuela con la carga de trabajo y
responsabilidad que se le vino encima. Es posible que se sorprendan por lo
dicho porque pensarán que trabajar y tener hijos es lo normal pero lo que no es
tan normal es que después de llevar unos pocos años casados, haber trabajo
mucho para ahorrar algo y haber sacado adelante a los hijos le ocurrieran estas
adversidades de manera escalonada:
1.- Sufrieron los efectos propios de una Guerra Civil y lograron sobrevivir a ella, superando los miedos
lógicos que se padecían entonces por culpa de los acontecimientos luctuosos que
ocurrieron en nuestro pueblo.
2.- En 1939 acabó la Guerra
Civil y Franco se sacó de la
manga un invento: [Mandó incautar el
dinero que había en la “zona republicana”.].
Lo hizo amparado en el “Decreto de 27 de agosto de 1938, Orden del 5 de septiembre
y publicación en el B.O. el 17 de septiembre de 1938.”
3.- Cayetano López
Pérez, su esposo, se vio obligado a personarse en el “Banco de España” el 30 de junio de 1939 para entregar en CAJA los fondos que ambos esposos
habían juntado trabajando.
Él entregó el dinero legal emitido por el “Gobierno de la República” y el “Gobierno de Franco” le dio dos recibos
por la entrega de 2850 y 16375 pesetas… ¿Para qué les sirvieron?
4.- Unos meses después, al llegar los fríos del invierno, el
abuelo se resfrió y en vez de mejorar empeoró, el resfriado se convirtió en
pulmonía y por ella se marchó con el Señor
al comenzar 1940.
Imagínense la situación en la que, de un mes para otro, se
vio metida mi abuela Rosa Antonia.
Una mujer acostumbrada a trabajar mucho pero desligada totalmente de lo que era
regentar un negocio pues esa labor la llevaba el abuelo Cayetano. Además, los ahorros que Franco les retiró le hubieran venido muy bien para seguir luchando
en la tienda y criando a sus tres hijos.
5.- Una enfermedad los dejó sin esposo y padre pero la INJUSTICIA de la política también actuó
en su contra y los dejó tiesos de dinero.
¿Se comprende ahora un
poco mejor mi cabreo y mi postura crítica?
Hubo una buena persona, muy amiga del abuelo, que les ayudó
mucho en la parte administrativa, Luís
Pérez Quiles. Este señor visitaba la tienda todos los días porque, además
de trabajar en el Sindicato, también
realizaba labores de “agente comercial”
y los visitaba para que le hiciera el abuelo los pedidos de los productos que
necesitaba en la tienda. Cuando acababan Cayetano
sacaba dos vasos, un papel de estraza con aperitivos y en el mostrador hacían
la liguera.
El señor Luís,
después de morir el abuelo, siguió visitando la tienda, les ayudó mucho con sus
orientaciones y por eso mi madre lo recuerda siempre, cuando sale en
conversación, con mucho respeto y cariño.
¿Puedo estar de acuerdo con la “Ley de Memoria Histórica” ateniéndome a la situación vivida por mi
familia y a lo que han hecho los políticos desde Franco hasta Pedro Sánchez?
Si estuvo mal lo que le hizo Franco a mi familia tampoco está bien esta Ley… ¿Por qué opino así?
Porque si al legislarla se pensó en reparar daños, también
debieron pensar en que éstos eran de “distintas
clases”.
“Localizar a las
víctimas y darles la sepultura” que se merecen es un derecho para sus familias y para el Estado un deber encontrarlos
e identificarlos pero… ¿Dejar en la
ruina a muchas familias de España con la “incautación” del dinero republicano
no fue un daño tremendo?
Pues piensen que, como la mía, también hay en España un
montón de familias que también lo sufrieron. Por ello opino que lo peor de esta
Ley es que fue legislada para contentar a su electorado de izquierdas, muchos de ellos con familiares que fueron
ejecutados por Franco… ¿Por qué digo
esto?
Porque cuando encuentran fosas con los ejecutados por la República no siguen con la exhumación
de los cadáveres… ¿Esos no son víctimas
o es que la Ley de Memoria no era para todos?
Desde que se puso en marcha lo que se ha conseguido con ella
es enturbiar la convivencia pacífica entre los españoles porque los afectados
de izquierdas, cosa lógica, desean recuperar a sus seres queridos pero no se
dan cuentan de que el objetivo principal del PSOE fue y es obtener VOTOS…
¿No somos capaces de ver con claridad
que remueven el charco cuando se aproximan las elecciones o cuando ven en peligro
sus sillones porque las encuestas de opinión no les son favorables?
Para que tengan una idea del daño real, material y moral, que
recibieron todas las familias afectadas por la incautación realizada por Franco a nuestros antepasados les voy a
exponer el estudio que realizó el “gabinete
jurídico del señor Garzón” y que fue publicado el 25 de enero de 2015 en “nuevatribuna.es”.
En mi familia no sabíamos nada de lo que se cocía en España
sobre este tema pues estaba promovido por algunas asociaciones de herederos de los españoles arruinados, juristas defendiendo derechos y políticos planteando esa laguna legal
en el Congreso.
De manera casual nos hemos enterado y fue porque mi tío Juan me llevó a casa muchas fotos familiares
y documentos de los abuelos. Los escaneé y se los devolví con la observación
jocosa de que no perdiera los recibos del “dinero
incautado por Franco” porque en
ellos pudiéramos tener un posible capital.
Unos
días después exploré bien el documento y descubrí algo que me llamó la atención,
el TÍTULO era muy curioso: FONDO DE PAPEL MONEDA PUESTO EN CIRCULACIÓN
POR EL ENEMIGO.
Entonces escribí en el buscador algunas frases, llegué al
lugar exacto y ahí encontré la información que buscaba.
El daño causado a quienes les fue “incautado” su dinero republicano sólo se comprende cuando, basados
en la estimación realizada por el Sr.
Garzón, cogemos la calculadora y hacemos la siguiente cuenta: Multiplicamos el valor actualizado de cada
peseta de entonces más los
intereses, se estima en 86,24 euros,
por el que cada familia perdió. Si la mencionada ley hiciera justicia a los herederos de mis
abuelos nos corresponderían 1 657
964 euros.
Abriendo la Biblia
podemos leer MARCOS 13, 28: [De la higuera aprended esta
parábola: cuando ya sus ramas están tiernas y brotan hojas, sabéis que el
verano está cerca.].
¿Podemos tener de
nuestros políticos la misma evidencia cuando legislan y saber que después de
hacerlo se nos hará justicia?
Creo que no porque ellos
y sus partidos, después de aprobarla, la han tenido de muleta para ayudarse a
caminar. Sólo se preocuparon de salir adelante con promesas oportunas que no se
cumplían nunca, enriquecerse a costa de arruinar a nuestra querida patria,
legislar para impulsar los intereses de su partido, crear un clientelismo numeroso
a base de conseguir estómagos agradecidos, no preocuparse de gobernar lo ajeno
con honradez y lupa, no ayudar a quienes más lo necesitan con programas que les
solucionan el problema de manera definitiva...¿A qué nos ha llevado este proceder irresponsable de los partidos y de
sus dirigentes?
A que cualquier persona sin preparación pueda ser aspirante a
dirigir los destinos de una comunidad de vecinos, un pueblo, una comunidad
autónoma o España.
¿Cómo hemos dado lugar
a que este formato nos desgobierne?
El modelo de gobernanza de esta línea política es tan simple
que lo puede entender cualquier peque, mover de manera oportuna el árbol de la
“Memoria Histórica” cada vez que el PSOE toma el poder y le van mal las
encuestas, lo hizo Zapatero y lo
sigue haciendo Pedro Sánchez. Con
esta táctica lo único que están consiguiendo es cabrear a muchas personas
sensatas y a remover el charco de la “Guerra
Civil”… ¿Así es como se consigue
olvidar el pasado y restablecer la PAZ?
Siempre actúan con el “manual
teórico de la izquierda” y por eso no tienen inconveniente en manifestarse
a favor de la “no violencia” en
cualquier oportunidad que se les presenta y después haciendo “escraches” o “alentando manifestaciones violentas” cuando les interesa si otro partido
es el que gobierna.
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