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martes, 9 de julio de 2019

EL GUITARRISTA


Colaboración de Paco Pérez

La música es una rama del arte que tiene mucho arraigo en nuestro pueblo y sería muy interesante que aquellos paisanos que han destacado en ella escribieran sus vivencias y nos aportaran datos históricos de la trayectoria que ésta tuvo en Villargordo.
El motivo de este post no es profundizar ahí sino mostrar una historia músico-pictórica que tuvo como protagonistas a dos personas que no se conocían, que las casualidades de la vida hicieron que entraran en contacto y que, un tiempo después, generara el breve relato que os voy a ofrecer.

Una mañana se encontraba Juan Pedro Morcillo ValderasChaparrito” tocando la guitarra, en la plaza Deán Mazas de Jaén, en concierto matinal callejero y, mientras interpretaba las piezas musicales para quienes transitaban por el lugar, se apoyaba sobre el basamento de las columnas que sostienen el soportal en el que está la puerta de entrada de la oficina que la entidad bancaria BBVA tiene ahí. Todos sabemos que es un lugar muy transitado y una de las personas que pasaba reparó en el señor músico, esperó que acabara su interpretación y después, dirigiéndose al músico, lo saludó:
- Señor, buenos días.
Juan Pedro le devolvió el saludo y le preguntó:
- ¿Qué desea usted de mí?
Mientras le tendía la mano se presentó:
- Me llamo José Luís García Campos, soy pintor y por esa razón deseo comunicarle que me gustaría pintarle… ¿Puedo hacerlo?
– Sí, no me importa que lo haga.
El señor José Luís se acercó hasta su domicilio y en poco tiempo regresó con sus útiles de pintura al encuentro de Juan Pedro, se acomodó para no entorpecerle su concierto, trabajó durante un tiempo en acabar un boceto fiable del concertista y, cuando lo tuvo acabado, recogió sus apechusques, lo saludó y le dijo antes de marcharse:
- Cuando lo tenga concluido, si usted lo desea, tendré la satisfacción de regalárselo.
Juan Pedro aceptó y se despidieron con los saludos de rigor.
Pasó un cierto tiempo y lo que parecía que había sido un encuentro circunstancial volvió a cobrar vida de manera casual una mañana en una notaría de Jaén, a ella acudió Miguel García GómezCanallilla” para resolver unos asuntos. Cuando estuvieron las personas implicadas en el acto documental ante el notario éste les leyó la documentación, después procedieron al acto de las firmas y, cuando estaban despidiéndose, el señor notario le comentó a Miguel:
- Al leer el texto que han firmado he comprobado que son ustedes de Villargordo.
Miguel confirmó las palabras del notario y le preguntó:
- ¿Conoce usted el pueblo?
– No lo conozco pero el motivo de mi comentario está motivado por algo que está relacionado con mi suegro y un señor de su pueblo –le aclaró.
- ¿Cómo se llama? – le preguntó Miguel.
El señor notario no recordaba bien el nombre y entonces balbuceó, sin mucha convicción, una palabra identificadora algo rara:
- Yo creo que se llama “chascarrillo”, o algo parecido.
Miguel, al escucharla, se sintió perdido pero después de unos minutos le pronunció un apodo conocido de nuestro pueblo:
- Yo creo ese paisano se llama Juan Pedro y de apodo “El Chaparrito”.
Cuando el notario confirmó el nombre le pidió a Miguel que lo localizara y le comentara que su suegro tenía acabado el cuadro que le hizo y que le gustaría entregárselo, como le había prometido.
Transcurrió el tiempo y el pasado 2 de julio fui con Miguel a esa misma notaría, estábamos esperando que nos atendieran, pasó el notario, se saludaron y retomaron el tema. Le preguntó por el guitarrista y él le comunicó que le había transmitido a Juan Pedro el mensaje, lo que le agradó mucho y le comentó que se acercaría a Jaén para recogerlo.
Comentaron las circunstancias personales que tenía el muchacho, las que le habrían impedido recogerlo y nos despedimos. Antes de llegar el notario a su despacho regresó hasta nosotros, nos invitó a acompañarle y, una vez que estuvimos junto a su mesa, miró en un cajón y nos sacó una litografía del cuadro.
La contemplamos y, mientras lo hacíamos, nos informó de que lo había pintado con “carboncillo”. La verdad, quedamos maravillados con la obra conseguida.
Antes de marcharnos le hicimos con los móviles unas fotos y, mientras las hacíamos el señor notario nos dijo que el suegro había hecho varias exposiciones con sus obras pictóricas.


2 comentarios:

  1. Buenas tardes. Ante todo, le felicito por sus agradables historias sobre Villargordo. Estoy buscando algún dato acerca de Alonso Chica García 'El Melonero'. Era de Mengíbar pero se trasladó a Villargordo en una fecha indeterminada. Soy bisnieto de un hermano suyo y me haría ilusión saber qué fue de él. Le agradecería cualquier dato que pudiese darme. Un cordial saludo.

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  2. Muy bonita la historia, mejor el relato y sublime el dibujo.

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