martes, 4 de junio de 2013


En recuerdo de Sebastián Almagro Castellano.

Gran figura de la aviación española. Centauro del aire.

Colaboración de José Carlos Castellano Calles

Capítulo III

Distinciones y Reconocimientos
 
 
Además de dos “Campeonatos Mundiales Acrobáticos de V.S.M.” tiene numerosas condecoraciones:
- Cruz al mérito aeronáutico 1ª clase.
-  "         "        "         clase.
- Medalla de plata de F.E.N.D.A (Federación Aeronáutica de Deportes Aéreos).
- Medalla de oro de F.E.N.D.A.
- Medalla al mérito agrícola.
- Medalla Campeonatos Mundiales S.T. YAN.
Así como otras muchas, que harían una lista muy prolija. A ésta habría que añadir, dos propuestas y ocho distinciones. En 2001 lo nombran hijo adoptivo de Palma del Río (Córdoba).
Al tiempo que F.A.A.S.A. se iba engrandeciendo, su familia también crecía.
Eligió como esposa a Pilar Morales Martínez y tuvieron cuatro hijos: Luís, Gustavo, Virginia y Luisa Fernanda. Luís murió en un desgraciado accidente, Gustavo es ingeniero aeronáutico, Virginia vivió mucho tiempo en E.E.U.U. y Luisa Fernanda casó con Miguel Ángel Tamarit (Piloto). Ellos les dieron muchos nietos.
También tuvo el honor de ser recibido, junto a su familia, por el Rey Juan Carlos.
Poco a poco, Sebastián, fue dejando la empresa en manos de sus hijos. Hoy día F.A.A.S.A la llevan, representan y presiden la familia Tamarit-Almagro. Al día de hoy, la compañía cordobesa es la segunda de España en el sector de alquiler de medios aéreos para la lucha contra incendios y protección civil. En 2011 facturó 55,5 millones de euros, incrementando la cifra de negocio un 4% respecto al ejercicio anterior. La mayor cifra lograda en 45 años. Su plantilla supera las 300 personas de forma directa. Presta sus servicios en toda España. Estas cifras consolidan a la empresa de Palma del Río como la segunda de España (primera con capital nacional) en el sector de alquiler de medios aéreos para la lucha contra incendios y protección civil, con una cuota de mercado superior al 20%. En sus talleres, además del mantenimiento de las aeronaves, también reparan a terceros y por allí han pasado más de ochenta aeronaves. Lo que les supone un 10% del total del negocio. Otra rama destacada es la relacionada con la formación y la simulación aérea.
La empresa Almagro-Tamarit, incrementó las horas de vuelo un 7% en 2011 pues superó las 7.000 horas, sin incluir las horas de formación. En la actualidad cuenta con más de ochenta unidades aéreas en la lucha contra incendios y emergencias médicas.
Es líder en Chile, allí tiene 26 aeronaves de forma permanente, que aportan el 10% de los ingresos del grupo. Trabajan para compañías agroforestales y para el gobierno chileno, en la lucha contra incendios. En 2011 voló más de 4.000 horas.
Hay que destacar la inversión en I+D+i y formación que superará los 100 millones de euros en 10 años. Formación pionera con Caena, que es la división formativa de F.A.A.S.A. Tiene la aprobación como Centro Erasmus del Ciclo Formativo de Grado Superior de Mantenimiento Aeromecánico en los 27 estados de la U. Europea (más Islandia, Noruega y Liechtenstein) para que los alumnos que lo deseen estudien el curso en estos países. De este modo, se convierte en el único centro de España que ofrece esta posibilidad.

La celebración de 1998
 
El 18 de abril de 1998, en Palma del Río, hubo un festival especial para homenajear a Sebastián Almagro. La A.P.A.V.E. (Asociación de Pilotos Aviadores Veteranos de España) se lo ofreció en el aeródromo de Palma del Río. En este homenaje colaboró el E. del Aire.
Sebastián uno de los pilotos más emblemáticos, con 55 años de V.S.M. y de Aviación Agroforestal en España. Al mismo tiempo Almagro, devolvería al Ejército del Aire el velero acrobático Ló 100 "Virgen de la Cabeza", el cual le cedieron para que lo volara, representando a España, en exhibiciones de V.S.M. Lo ha mantenido y cuidado durante 45 años, y con él ha engrandecido a España y a su aviación durante este tiempo. A la fecha de ese merecido homenaje, Sebastián tenía 75 años, de los cuales llevaba 55 volando.
A la ceremonia asistieron: generales, coroneles, oficiales en activo y retirados, alcaldes, autoridades locales, comandantes de líneas aéreas, amigos y familiares.
Alrededor de las 10 de la mañana comenzaron las actividades del  festival. Se descubrió la placa del Aeródromo de Palma del Río que, desde ese momento en adelante, se llamaría Aeródromo de Sebastián Almagro.
Por cierto, que mi tía y prima hermana de Sebastián, Teresa Castellano López, se enfadó con él y le dijo:
- El aeródromo se debería de llamar Sebastián Almagro Castellano, ¿Acaso, no eres Castellano? ¿Por qué sólo le pones el primer apellido? Pero como había tal barullo de gente, Sebastián no le hizo mucho caso aunque, con el paso del tiempo, se lo volvió a echar en cara.
A continuación se celebró una misa de campaña.
 
 
Después la exhibición aérea y en ella participó Sebastián, con un biplano Gruman Agcat hizo un vuelo acrobático. Luego los F-18 y un P-3 Orión de la Base de Morón de la Frontera, cuatro C-101 de la Patrulla Águila de la A.G.A.
La P.A.P.E.A. (Patrulla Acrobática Paracaidista del Ejército del Aire) hizo una demostración de originalidad y precisión. Un avión y un helicóptero de F.A.A.S.A. hicieron una demostración de recogida y suelta de agua, simulando el apagado de un incendio. Dos helicópteros militares, demostraron su precisión y maniobrabilidad en el vuelo y toma de tierra.
 
Por último, Almagro Castellano hizo su postrer vuelo con el Ló 100. Hizo algunas acrobacias y tomó tierra con exactitud matemática, dejando el avión frente a la tribuna de autoridades. Después de descender del aparato se encaminó a dicha tribuna para recordarnos cómo vino a España el Ló 100 "Virgen de la Cabeza", el velero acrobático más antiguo del mundo, y con el que había completado más de 1.500 h. de vuelo. A partir de este año, 1998, permanecerá estático en el Museo del Ejército del Aire, en Madrid.
Finalmente, y para cerrar la celebración, Almagro Castellano invitó a todos los asistentes al acto a un generoso almuerzo en los locales pertenecientes al aeródromo.
El Ejército del Aire, en colaboración con la A.P.A.V.E., hizo un acto de reconocimiento al extraordinario e irrepetible piloto que fue Sebastián Almagro Castellano.
Sólo me resta desear que todos los aquí nombrados, y que ya no están presentes, "Descansen en Paz".

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