Colaboración de José Martínez Ramírez
Hace ya muchos años trate por mi trabajo en el
Tropezón, entre otros, a Joselillo Carretero y también a algunos de sus muchos
hermanos. Lo hacía, sobre todo, en
Navidad y en verano porque era en esas
fechas cuando Salvoris, sobre todos, y alguno más se dejaban caer por el
pueblo.
Joselillo solía tomar siempre una cerveza y
después unas copitas de Alvear, los jóvenes de ahora seguro que ignoran que
éste es un vino excelente de Moriles, aunque el vino de esta amable tierra es
otra historia.
Recuerdo muy bien un día y con especial cariño,
aunque hubo otros muchos, que me llevaron a buscar espárragos los hermanos Carretero
al paraje conocido como “El Risco”, perteneciente a la finca de Pozo Ancho del
Rey. Durante el trayecto por la carretera de Torrequebradilla nos dijo
Joselillo al contemplar un mochuelo:
- Mirad, un mochuelo de alambre!!!!
Los ocupantes del vehículo que conducía su hermano
Benjamín, asentimos con cierta sabiduría bucólica y alguna sonrisa sonora. Algo
más adelante, al ver otro, nos volvió a decir:
- Mirad, un mochuelo de majano!!!!
La misma tónica se volvió a repetir entre sus
acompañantes. Más adelante, entre carcajadas y demás, cerca de Pozo Ancho del
Rey vio de nuevo otro mochuelo en la
cuneta del camino y continuó con sus ocurrencias:
- Mirad, un mochuelo de terrera!!!!
Yo, en aquellas fechas, era un imberbe ausente de
los conocimientos mínimos en cuanto a la fauna y la flora y, cuando regresé al
pueblo, me reuní con la pandilla de amigos en el lugar de todos los días para
jugar.
Estábamos hablando y les conté donde había estado
aquella mañana con los hermanos Carretero y que durante el viaje había visto
tres clases diferentes de mochuelos, habitantes en la entrañable tierra que los
vio nacer, y les relaté los detalles de la experiencia que viví. No sé si se lo
creyeron o no pero supongo que sí porque nadie me llevó la contraria. Yo,
aquella noche, dormí muy feliz por la atención que mostraron al hablarles de
ellos y por las explicaciones que les di cuando me preguntaban por los
detalles.
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