Villargordo nos reúne

Al Sol le llaman Lorenzo

y

a la Luna Catalina

Colaboración de Paco Pérez

En nuestro programa de actividades diarias está contemplado que hay que dar prioridad a todas esas acciones que tiendan a mejorar el conjunto de nuestra salud y Nerja nos ofrece unas ventajas que no las tenemos en Villargordo, el poder transitar por distintos lugares. Nosotros, conocedores de esas posibilidades, las explotamos para evitar la monotonía y así logramos hacer el paseo mucho más ameno. A cada una de las rutas que hacemos le solemos dedicar un tiempo parecido, algo más de una hora, y siempre encontramos en ellas elementos atractivos que nos facilitan el caminar:

1.- URBANAS

Lo bueno que tienen éstas es que siempre encontramos diferentes atractivos pues se mezclan varios elementos: café, escaparates, bellezas naturales, visitas a los templos, compras…

  

 

 

 

2.- LUGARES TÍPICOS

Aquí buscamos el no tener atranques con el entorno y así conseguimos hacer unos recorridos sin pérdidas de tiempo. Además de esta ventaja recibimos el poder respirar un aire más limpio y el estar de manera permanente en contacto con la naturaleza.

 

 

 

 

 

 

 

Íbamos la semana pasada por el río Chíllar, observamos  un cielo nublado que mantenía al Sol en un estado particular y optamos por grabarlo.

Mientras contemplábamos la escena recordé a mi esposa que en nuestra niñez había una canción muy popular que era muy escuchada a través de las ondas radiofónicas, tarareé la letra varias veces y logramos llegar al nombre de la canción y también completamos parte de su letra:

Al Sol le llaman Lorenzo
y a la luna Catalina,
cuando Lorenzo se acuesta,
se levanta Catalina.

Pero mira, mira, mira,
ay, pero mira, mírame.
Pero mira, mira, mira,
ay, pero mira, mírame…

Recordemos el tonillo de la reliquia musical “El Sol se llama Lorenzo y la Luna Catalina”. Un CLIC en el título.