viernes, 26 de octubre de 2012

“El Paseo 4”

Colaboración de José Carlos Castellano

Pub "Don Pancho”
Plaza de la Constitución
Villargordo (Jaén)
ESPAÑA

Capítulo IV

La discoteca se montó de nuevo, esta vez detrás del bar y con una iluminación mucho más moderna. Los servicios bajo la escalera de acceso a las viviendas. En ella ocurrió un evento histórico para el pueblo… ¡La visitó D. Landelino Lavilla!
Este señor fue un político muy importante en España, militaba en UCD (el partido de D. Adolfo Suárez González). Allí dialogó con los vecinos del pueblo. Esta visita al pueblo la realizó como un acto de campaña electoral, teníamos las primeras Elecciones Generales de la incipiente España Democrática.
Cuando acabó su intervención le preguntó al pueblo por sus inquietudes, deseaba conocerlas. El primero que pidió la palabra fue el inolvidable PérezEl viejo”.
Este establecimiento, en las fiestas de “Santiago” y “Las Flores”, organizó, unas veces con el patrocinio del Ayuntamiento y otras veces por su cuenta y riesgo “carreras de camareros” y “concursos”, simpáticos y originales, durante los años sesenta y setenta. A saber: de chistes, de cargantes, de bailes, de dominó, de tute, de brisca, de chinos, de ajedrez, de futbolín, de billar, de ping-pong, de cantantes... Estos concursos casi siempre los organizaban Antonio y Juan Pedro Castellano.
El de “cargantes” fue el más popular. Consistía en que los participantes tenían que decir lo que quisieran hasta que aburrieran a los contrincantes y éstos, agotado su repertorio, se retiraran. Los contrincantes más famosos fueron Luís Sampedro y Blas Navarro Cornacha”. El primero fue el ganador y desde entonces es conocido como LuisitoEl cargante”.
También son dignos de recordar, por simpáticos e irónicos, algunos de los anuncios que éste establecimiento publicó en el programa de fiestas de Santiago, en Honor del Santísimo Cristo de la Salud, el que cada año editaba el Excmo. Ayuntamiento.
¡Ahí van dos, en clave de humor!
Decían así:
Nº 1

"Café Bar Deportes"Servicio esmerado y tranquilo.
¡Cerveza fresquita, con almendras bien contadas!
Autor: D. Blas Castellano López “Pancho”.
Nº 2

 "Café Bar Deportes"
Tapas variadas: Patatas fritas a la inglesa, patatas a la
servilleta, patatas al plato, patatas al puñao, patatas chicas, patatas
grandes, patatas trilladas y… ¡Patatas, patatillas y papas!
Autores: José Carlos y Juan Pedro Castellano.
 

Capítulo V

En febrero, del año mil novecientos ochenta, se acomete otra reforma. El salón de arriba se convierte en vivienda y se suprimen los juegos recreativos. En el salón de la planta baja se quitan el bar y la discoteca antigua, se conserva la estructura y se hace una discoteca modernísima.
En esta reforma trabajaron: Juanito y Manolo (Luiches) y Juan Ruiz “Pesetero”, albañiles locales.
La barra, fabricada de madera, con almohadillados de napa sintética, amplia y larga. Para sentarse en ésta unos taburetes de acero inoxidable y asiento almohadillado. Al final de la barra, el guardarropas y sobre éste la cabina del pinchadiscos. La barra a la
derecha, según se entra por Plaza de la Constitución. Ésta y todos los ornamentos de madera: botelleros, barandas, adornos… fueron fabricados por los hermanos Lerma. A la entrada, a la izquierda, había veladores y mesas con sus correspondientes sillones, tresillos, biplazas, individuales y taburetes.
Este lugar de reunión, estaba separado de la barra por barandas retorneadas y celosías de madera (estilo árabe). A continuación se encontraba la pista de baile. Del techo colgaba una iluminación vanguardista (sicodélicas, flax, haces de luces, esfera con
espejitos, cañones de luces etc.). Todas las paredes del local estaban alicatadas a media altura y decoradas con cuadros de cerámica imitando mosaicos griegos y romanos. El suelo enlosado, con gres verde y marrón. La pista de baile embaldosada con gres de diferentes colores, haciendo dibujos geométricos. Al fondo más asientos como los descritos anteriormente, y los servicios.
El bar, como tal, desapareció aunque en verano se siguió sacando mesas y veladores a la amplia terraza.
Otra vez le cambiamos el nombre, de "Bar Deportes" pasa a ser llamado "Discoteca D. Pancho", en memoria del fundador del establecimiento, D. Blas Castellano López "Pancho".

La última reforma se realiza en los años noventa, se elimina de nuevo la discoteca y se transforma en un moderno pub que es llamando "D. Pancho". Además, en la parte posterior, se construyó un burguer con el mismo nombre. Lo llevó Dª Mariana Molina, esposa de Juan Pedro, hoy descansa en paz.


Mariana supo dar al “burguer” un aire peculiar. Estaba decorado e iluminado con estilo muy modernista y equipado con todos los utensilios necesarios para cocinar cualquier tipo de alimento. El mobiliario estaba en consonancia con la decoración y con la iluminación. Tenía la entrada por la calle DR. Sagaz, frente a la farmacia de D. Andrés Padilla.


Hoy se encuentra cerrado porque la defunción de Mariana nos destrozó, sobre todo a Juan Pedro e hijos. La ilusión con que trazaron los planes familiares para el establecimiento desapareció.
El pub sigue teniendo la entrada principal por Plaza de la Constitución. Se le modificó la fachada con un aire moderno y una iluminación fantástica.


A la entrada, a la izquierda, nos encontramos la barra, amplia, ancha y larga, y a continuación una barrita a desnivel. Está fabricada con cerámicas, vidrios y marmolinas, la encimera de un material moderno, simulando mármol rojo (silestone). En la barra, para sentarse, hay taburetes de acero inoxidable y los asientos son de madera especial, muy dura y pulimentada. En la barra pequeña también hay taburetes, adecuados a su altura, de acero y con el asiento de espuma almohadillada. Frente a la barra hay mesas con sillas y tresillos para las tertulias y el descanso. La pista de baile se ha  sustituido por una mesa de billar americano y al fondo, como siempre, los servicios.
Esta última reforma la realizó Juan, “El pincha”.
Este establecimiento, siempre sintió gran atracción por la música. De modo que tanto en el bar, como en la discoteca o en el pub, siempre sonaron y suenan los grandes éxitos del momento. También hay que destacar que por éste establecimiento pasaron y actuaron en directo, grupos musicales que en ese momento estaban en el candelero musical y con gran popularidad, “Apache” a nivel nacional y “Nuevos Nublos” en el plano local.


Con los medios audio-visuales también estuvo siempre tuvimos la última novedad. Una de las primeras radios, la primera televisión del pueblo, videos, proyector, gran pantalla de televisión, equipos de música, etc. Resumiendo, desde la primera radio, un mueble que aún se conserva, hasta los aparatos audiovisuales más modernos.
Equipo familiar que hizo posible con su trabajo la duración, en el tiempo, de éste local: Blas Castellano López, el fundador, hijo de Blas e Isabel, casó con Encarnación Calles, hija de Antonio y María. Tuvieron cinco varones: Blas, Antonio, Jesús Andrés, Juan Pedro y José Carlos. El primero en trabajar, fue Blas. Después siguió Antonio y así sucesivamente. El primero en irse fue Jesús A. y lo hizo para trabajar en el comercio del  tío Andrés, hermano de mi madre. Hoy está jubilado, pero el comercio sigue funcionando, lo regenta su hijo Blas. Blas dejó de trabajar como barman, a mediados de los sesenta. Alternando sus labores de camarero con las de estudiante, acabó sus estudios de maestro de Primaria y ejerció como tal, ya está jubilado.
José Carlos siguió el ejemplo de Blas, abandonando el negocio familiar en febrero del ochenta para ejercer de maestro de Primaria, hoy también está jubilado.
En el bar continuaron Juan Pedro y Antonio Castellano, ayudados por sus esposas. Antonio no tuvo descendencia, hoy está jubilado. Juan Pedro, tuvo tres hijos: Blas, Sebastián y María Encarnación. Juan Pedro también está jubilado. Su hijo Blas es fotógrafo, montó un estudio en Mengíbar. Mª Encarnación trabaja en Madrid. Sebastián se casó con Paqui Carretero. El establecimiento familiar lo regentan entre los dos.
Quiero dar las gracias a los camareros que han pasado por esta casa y muy especialmente a todos los clientes, sin cuyo apoyo hubiese sido imposible que hubiéramos perdurado los “Panchos” tanto tiempo en el campo de la hostería local.
Como despedida decirles a mis sobrinos Sebastián y Paqui
¡¡¡Ánimo y a cubrir nuevas etapas!!! ¡¡¡Enhorabuena y Felicidades!!!
             

 Villargordo, octubre de 2012.
                         

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