Colaboración de Paco Pérez
¿CÓMO DEBEMOS HACERLA?
Los
habitantes de Sodoma y Gomorra habían ofendido tanto al Señor que terminó por condenarlos. Abraham trató de evitarlo y conversó
con Él para pedirle clemencia por
los inocentes que allí había, el Señor le escuchaba sus propuestas de perdón y
por mucho que bajó sus exigencias el momento no deseado ocurrió.
En
esta escena se nos muestra cómo debe ser el encuentro del hombre con el Señor,
una conversación amigable en la que expongamos nuestros problemas sabiendo que Él siempre nos atenderá pero sin
olvidarnos de que debemos acercarnos con la humildad de reconocer nuestros
errores, mostrarle nuestro sincero arrepentimiento y la intención clara de
cambiar la conducta.