Alcanzar
la notoriedad en la sociedad y que ésta te lo reconozca no es fácil pero si,
además, esa fama se alcanza junto a la pareja pues considero que el mérito es
mucho mayor.
Hacer
aquí una exposición de todas las parejas que pasaron a la historia por hacer
algo digno no es mi intención, lo que sí pretendo es sustentar mi argumento: [Nadie es encumbrado por capricho, algo
especial tiene que haber para que quienes los rodean decidan darles su reconocimiento.].
Quiero
resaltar que ser famosos no significa, al menos para mí, que sus vidas sean un
ejemplo a seguir.
Quienes ostentan el mando en la sociedad,
religiosa o civil, siempre suelen hablar
con propiedad de las cosas que no son tangibles y lo hacen dando normas o
explicaciones a quienes son el pueblo sencillo de los hijos de Dios. Con esta
táctica atemorizaban a la sociedad cuando acusaban al demonio de causar ciertas
enfermedades, sobre todo, si las personas estaban afectadas por trastornos
psíquicos o mentales. A quienes les ocurría les llamaban “endemoniados” y decían de ellos que estaban poseídos por él.
Frasco, como todos los de su generación, tuvo que
servir a la Patria unos años como soldado de reemplazo.
Todos los que hemos cumplido con ese deber sabemos
que después de estar en el cuartel de destino un cierto tiempo los soldados
venían a casa con permiso. Lo normal era que al acabarse éste todos regresaran puntuales
el día que les cumplía pero también había algunos que por razones no
justificadas se retrasaban, Frasco no llegó puntual pero sí le ocurrieron
hechos que justificaban el retraso de unos días.
Llevo
tiempo intentando mostrar a la ciudadanía los problemas que ocasionan en las
vías públicas, en el mobiliario urbano y en las viviendas particulares los
animales incontrolados y, si lo están, a la hora de la verdad se demuestra que el
resultado obtenido es como si no lo estuvieran porque los acompañantes
dramatizan muy bien el papel de paseantes invidentes para no cumplir con su
obligación. Los hay que sí la cumplen, si de restos sólidos se trata, pero… ¿Cómo solucionan el problema si la necesidad
que se presenta es líquida?
La
Biblia debe ser el punto de
referencia de la fe del cristiano porque contiene las tradiciones primeras y las que reflejan la fundación de nuestra
religión. Los evangelios son avance
sobre lo anterior y en ellos se nos muestra el poder sagrado y único de Jesús. Lo tuvo porque enseñaba con autoridad y asombraba
a quienes lo escuchaban porque no tenía estudios y los escribas sí. Esa
circunstancia no le impedía presentar siempre al pueblo la esencia de su
mensaje y lo conseguía porque lo hacía partiendo del conocimiento profundo que
tenía de Dios, por eso su palabras eran acogidas muy bien por la gente y le
llamaban Maestro.
Este viaje al pasado me fue regalado por Francisco Martos Torres “Franciscoche”. Mi
primo es una de las personas más graciosas que hay en el pueblo, hijo de Domingo Martos Mendoza, un personaje célebre
que protagonizó en su vida algunas historias dignas de ser conocidas.
El 31 de enero de 2013 viajé con Mari a Jaén y “Franciscoche” se subió también en el
autobús porque vive en la capital. Nos sentamos juntos y comenzamos a recordar
cosas del pasado y así fue cómo surgió el que nos hablara de las cosas que
tenía su padre:
El
19 de mayo de 2012, en la Plaza de
España de Nerja (Málaga), hubo unas jornadas culturales
en las que la gastronomía ofreció productos
típicos de distintos lugares de la Axarquía,
se degustaban o compraban en los variados puestos que había; los jabones y productos de baño caseros, elaborados con esencias de diversos aromas;
el arte, presente con puestos de
venta de sus obras y algunos creadores trabajando… Hubo más muestras presentes
pero, a mi entender, sin destacar y por eso me limito a las que me llamaron la
atención de manera especial.
Un día, Juan
Francisco Guijarro “El papo”
comía con la familia un arroz con almejas. Mientras movían la cuchara y el
bigote hablaban poco y él, cuando ya le quedaban en el plato sólo unas
cucharadas, rompió el silencio sepulcral que habían mantenido para decirle a su
esposa:
Cuando
leemos o escuchamos el mensaje de Jesús y lo comprendemos un poco nuestro espíritu
recibe un soplo fresco de la VERDAD, se abre a todo lo que viene de Él, nos
ilusionamos con cumplir sus propuestas y así es como nos fortalecemos los
cristianos. Un tiempo después… ¿Cuando recibimos ofensas y agresiones por
seguirle continuamos su camino sin tropezar, regresamos a casa con las mismas
ilusiones que cuando salimos o lo hacemos cansados y desilusionados?
Quedarán
en Nerja pocos espacios urbanos por los que no hayamos pasado o visitado en
alguna ocasión durante las muchas horas que dedicamos a pasear por sus
alrededores o por el interior. Pues bien, hoy voy a presentarles un lugar de
sus alrededores, está a la entrada del pueblo, si lo hacemos por la carretera
vieja de Málaga; habíamos pasado por allí infinidad de veces pero nunca le habíamos
ordenado a nuestra atención que le dedicara unos minutos. Un días lo hicimos y
después nos preguntamos cómo no nos habíamos dado cuenta antes de su presencia y
la única explicación que le encontramos fue ésta: [Unos metros antes de llegar
al lugar había, este año ya ha cerrado, un negocio dedicado al cuidado y a la
monta de animales: caballos, mulos y asnos.].
Siempre
estuvo presente la salud en la sociedad y Jesús, en su permanente preocupación
por los hombres, hizo cosas en su favor para mejorársela o devolverles la vida.
Este conjunto de hechos están presentes en la Biblia y se encuadran en un grupo
de acciones prodigiosas que son conocidas como milagros. Para que éstas sean consideradas como tales es necesario
que lo sucedido sólo pueda ser realizado mediante una acción que se escape de
las posibilidades del hombre y que sólo pueda conseguirse con la intervención
de Dios… ¿Podemos afirmar o negar que el
autor de los hechos especiales o milagrosos es Dios?
Hace unos días me contó un amigo la historia que le
tocó vivir cuando compró una casa para uno de sus hijos.
La familia vendedora era representada por un
familiar, Rafael, y con este señor
hizo el trato. Una vez acordado el precio, se escribieron los acuerdos en un documento
privado y lo firmaron ambas partes.
Francisco
Pérez Soriano, mi abuelo, fue una persona muy popular para ciertas
generaciones de villargordeños y para otras, las nuevas, un total desconocido debido
a que murió en 1981 y desde entonces ya ha llovido bastante en nuestro pueblo,
razón más que suficiente para que su huella esté en peligro de extinción. Lo fue
por su forma de entender la vida y yo diría que en ese campo se anticipó en
varias décadas a sus coetáneos y en otros temas fue una persona normal que amó
a su pueblo y por ello siguió fiel a las tradiciones del lugar, por ejemplo, su
incuestionable fervor por el Santísimo
Cristo de la Salud.