Colaboración de Paco Pérez
PROCESIÓN MARINERA EN NERJA (MÁLAGA)
Un
año más Nerja celebró la fiesta religiosa
de la “Virgen del Carmen” y en los
días programados hubo “ofrenda floral”,
“bailes populares”, “moraga” en la Plaza de los Cangrejos, misa,
procesión por las calles del pueblo
y la “procesión marinera” que parte
de la playa de Torrecilla para recorrer
las otras y, acabado el recorrido, la desembarcan en la playa de “Calahonda”. En ese entorno se quemó una
bella muestra de fuegos artificiales y una vez concluida la imagen fue retornada a la parroquia de El Salvador.
Este
año nos hemos visto sorprendidos con una “procesión
marinera” anómala… ¿Por qué?
Porque
se sentían ya los tambores, circunstancia que nos anunciaba que la imagen
estaba próxima a la playa de Torrecilla,
y todavía no se habían presentado las tradicionales embarcaciones y los parapentes.
En casa ya empezamos a sopesar la posibilidad de que no hubiera procesión
porque como el día anterior el mar estuvo alborotado pues tal vez pudieran
haber decidido no hacerla. Lo que sí estaba igual era el ambiente.
Una
vez en la playa el ritual siguió la tradición: Remojón en el agua con el trono, levantá y retorno a la arena
para su acople en la barca.
Acabado
el anclaje del trono en la barca de
la Cofradía se procedió a su botadura y después se inició la
procesión con el acompañamiento de otra con marineros cofrades y la de “Protección
Civil”.
Desde
Torrecilla inició su marcha para visitar
las playas de “El Chucho” y “El Playazo” hasta “Punta Lara”.
De
regreso, continuó su viaje para visitar el resto de las playas.
Cuando
se alejó la imagen dimos por acabada nuestra presencia en el “torreón” pues la noche hizo que la temperatura
bajara y el cuerpo se había enfriado.
Nosotros,
mientras esperábamos que pasara la comitiva procesional, habíamos especulado
con las razones que podían haber ocasionado que, por primera vez, el acompañamiento
hubiera sido nulo pues las tres embarcaciones eran las oficiales, dos asociadas
a la Cofradía y una tercera a Protección Civil.
Estábamos
con estos comentarios Mari y yo cuando,
quienes estaban a nuestro alrededor, comenzaron a lanzar dardos acusadores
contra los marineros pues, según ellos, éstos hablaban mucho durante el año y
luego no hacían nada. Cuando pasó la barca con la imagen esos señores empezaron
a darle voces y ahí acabaron sus comentarios.
Estas
fotos nos van a transportar hasta la procesión
de 2015 y por ellas podremos comprender, por la añoranza de otros años, el
enfado de los presentes.
Al
día siguiente estábamos en una cafetería y, a nuestro alrededor, unos señores
hablaban de la procesión y entonces, con gran sorpresa, escuchamos que no
habían acudido más participantes porque estaba prohibido hacerlo. Entonces, uno
de los señores se sintió sorprendido y preguntó:
-
¿Quién lo ha prohibido? ¿Por qué razón lo ha hecho?
Otro
le contestó así:
-
No lo sé pues sólo me han comentado que en la procesión del año pasado la Guardia Civil descubrió que dos
embarcaciones aprovecharon la masiva presencia de otras para mezclarse con las
otras para introducir algo prohibido.
La
persona que habló no lo hizo en términos afirmativos sino haciéndose eco de la
noticia comentada por otras personas en otro lugar.
Nosotros
no nos creímos lo escuchado porque los “parapentes”
no eran embarcaciones y tampoco aparecieron. Yo así lo escuché y así lo cuento.
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