Colaboración de Paco Pérez
Ha muerto Concha
García Campoy y algunos jóvenes se preguntarán… ¿A cuento de qué viene esta noticia hoy al BLOG?
Porque una muerte siempre es lamentable pero esa razón nos llevaría a no hablar de otros
temas. En el caso de Concha la razón
por la que me hago eco NO será porque
haya sido una comunicadora de gran
relevancia nacional, que lo era,
y SÍ por la única razón de peso que
me ha empujado a hacerlo: Sus antepasados
vivieron en Villargordo.
Ella conocía estos orígenes y un año fue invitada por
Pepe Gómez, cuando fue nuestro
alcalde, para ser la pregonera de
las “Fiestas de Santiago”. Todo
estaba hablado y organizado para que nos acompañara pero a última hora comunicó
que no podía venir, no conozco cuál fue la verdadera razón que la llevó, a
última hora, a declinar la invitación.
En el siglo pasado sus abuelos, Cosme y Concha, residieron en la calle La Libertad número 12, eran vecinos de Antonio José “El chato”,
el abuelo de Antonio “El quinto”. La casa donde vivieron se
la tenían alquilada a Juan Cañas “Canuto” (este apodo le vino porque
nació en el día de San Canuto), el
abuelo de mi suegra. En ella vivieron hasta que el hijo menor de Juanico se casó y ya necesitaron la
casa.
El abuelo Cosme
tuvo un gran amigo en nuestro
pueblo, Paco “El baezano”. Este señor fue el abuelo materno de Pascual Angulo.
Esta familia no era de Villargordo y Cosme trabajó,
antes de 1936, en “Arbitrios”. A esta profesión se accedía
mediante una subasta pública municipal y la persona que más dinero ponía en la
puja se quedaba con el trabajo. Éste consistía en vigilar el movimiento
comercial de la economía local, pesando los granos y midiendo los líquidos que
se producían en las cosechas de los agricultores. Era la forma que había antes
para que el Ayuntamiento recaudara los impuestos.
Este señor fue muy agradable en el trato, tenía
unas buenas relaciones con los vecinos y su pensamiento político estuvo
alineado con la izquierda.
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