AÑORANZA DE MI PUEBLO

Alentado por el sugerente título de vuestra página web, he vencido la pereza o el recato y me he animado a dirigirme a vosotros para contaros mi Historia.

Me llamo Francisco Tirado Moral y tengo 57 años; soy hijo, nieto y bisnieto de villagordeños (como mínimo); nací en Villargordo y formo parte del colectivo que componen la "diáspora" de hijos del pueblo cuyos padres, en mi caso, emigraron a otras regiones y en algunos casos a otros países para buscar un futuro mejor para los suyos.

Mi familia paterna pertenece al apodo de "los Chindos" y mi familia materna a "los Serios"; ambas familias han sido pródigas y abundantes, por lo que puedo afirmar que paseando por el pueblo me puedo cruzar con numerosos primos más o menos lejanos y caras familiares, aunque ya desconocidas. No sé si hoy se podría desentrañar mi árbol genealógico, dado que según me contó mi padre (ya fallecido) él presenció como ardían en la Plaza de la Iglesia los archivos eclesiásticos al comienzo de la Guerra Civil. Como es sabido, los archivos civiles actuales son más recientes y datan de mediados del siglo XIX. 

En mi caso, una parte de mi familia se instaló a finales de los 50 en Cataluña, y allí nos dispersamos por diversas poblaciones alrededor de la gran urbe barcelonesa (Vilafranca del Penedés, Martorell, Badalona, Cornellá, L´Hospitalet del Llobregat, etc.). Mis padres me contaron muchas veces las dificultades de sus inicios en Cataluña, su precaria existencia, y las dificultades en comprender otra lengua, otra cultura... Todos los veranos de mi infancia volvíamos a Villargordo, y tras un largo e interminable viaje en tren llegábamos llenos de alegría a reencontrarnos con la familia, los vecinos y los amigos que seguían allí y que nos acogían con cariño.

Me ha quedado un grato recuerdo de aquellos veranos, sobre todo, por la libertad que disfrutaba al poder recorrer solo todo el pueblo, las noches claras, los olores, las calles empedradas... En fin, una forma de vivir que ya no existe.

Aún hoy, en las ciudades enumeradas anteriormente y otros lugares del resto de España (Madrid, País Vasco, etc.), viven dispersos muchos hijos de Villargordo pero la memoria se va diluyendo y sus descendientes no tienen apenas contacto con la realidad del pueblo, ese no es mi caso.

En una ocasión oí en un recital de la "Nova Canço Catalana" a  un cantautor que decía: "... quien pierde sus orígenes pierde su identidad... ". Y tenía razón: yo soy de Jaén, mis ancestros están enterrados en el cementerio de Villargordo y mi lengua y costumbres más primigenias son de Jaén. 

A modo de homenaje, a veces, en medio de algún buen momento de ocio con mis amigos, suelo exclamar con un… ¡La virgen, nene!  Esta es una frase que siempre me ha parecido entrañablemente graciosa y que oía a menudo cuando visitaba Villargordo (aunque desconozco si ha pasado de moda...).

Durante aquellos veranos en Villargordo, hablo de los años setenta, ocupaba mi tiempo libre en una afición que heredé de mi padre, la fotografía. Por ella conservo varias docenas de negativos en blanco y negro, los que unidos a los que me dejó en herencia él componen un pequeño retrato de una época y de unas personas, la mayoría de las cuales ya no están con nosotros.

A modo de muestra os adjunto esta “foto de grupo”, es de mediados de los años 50:

En ella he podido identificar a las siguientes personas:

1.- El señor con gorra de plato es "Frascuelo", fallecido. Éste era primo hermano de mi padre, ya sabéis que fue alguacil del pueblo durante muchos años y era muy querido por todos.

2.- La persona que hay de pie, a la izquierda y con un cigarrillo, es Juan "el largo", fallecido. Emigró del pueblo a principios de los años 60 y se asentó junto con su familia en un pueblo llamado Banyeres del Penedés (Barcelona). En esa población, hoy en día, sus descendientes son numerosos y se han entroncado con familias catalanas muy conocidas en la comarca.

3.- Las dos ancianas que aparecen son hermanas, junto con el anciano con boina, una de ellas (la más centrada) era mi abuela (Adela López Berrio) y la otra es la tía Manuela, madre de Juan "el largo".

Desconozco la identidad del resto.

Acabo mi c.e. felicitando al colectivo que se esconde tras el seudónimo de Ángel Lozano Torralba por la brillante idea de crear la página web, y deseando que dicha sirva, como bien decís, para recuperar la memoria de nuestros antepasados y como punto de encuentro para todos los villagordeños.

Un saludo

El equipo de "Villargordo nos reúne" comenzó a mostrar la foto a algunas personas mayores del pueblo para identificar a sus componentes y, hablando con unos y otros, hemos logrado que a los nombres remitidos por Francisco Tirado Moral se añadan otros y así se complete el grupo de manera total. Estas son sus identidades:

Queremos agradecer a Francisco su aportación y pedirle que revele esos negativos y que nos remita el fruto de su bien hacer, las fotos del pasado, para que sean publicadas con sus aportaciones y las nuestras.

Ánimo y a trabajar por la memoria de nuestro pueblo querido, Villargordo.