Colaboración de Paco Pérez
El
domingo, en los templos de España, se daba lectura a unos textos que, para mí, tenían
una importancia capital para la comprensión del hecho religioso. No obstante,
la experiencia de la realidad del día a día me desborda siempre porque compruebo
que lo que más cala en el pueblo es el espectáculo,
entiéndase: calles arregladas, altares así o asao, vestimentas...
¿Por qué seguimos en esta dinámica todavía?
Porque
no se toma nunca la decisión de llamar a cada cosa por su nombre y porque
quienes nos sentamos en los bancos estamos muy contentos con esta cómoda
religión que vivimos porque no nos compromete con nada ni con nadie pero sí nos
mantiene la conciencia adormecida.
Lecturas
del domingo y sus mensajes: En la PRIMERA
(Éxodo 24,
3-8) encontramos el fundamento de la ANTIGUA ALIANZA de Dios con su pueblo. En el EVANGELIO (Marcos 14, 12-16. 22-26) Jesús nos dejaba la esencia de la NUEVA ALIANZA. En la SEGUNDA
(Hebreos,
11-15) se nos establecían las diferencias entre las dos.
Si
por curiosidad, en cualquier templo de España, hubiéramos preguntado a quienes
participaron en la fiesta del Corpus…
¿Qué mensaje les ha impactado más a
ustedes?
Unos
pocos habrían estado atentos y hubieran respondido bien a la pregunta pero, tal
vez, la mayoría hubiera respondido diciendo que estuvo distraído porque hizo
mucho calor, o que el recorrido fue muy largo, o que se marcharon antes de
concluirlo por el calor y los peques, o que las calles y los altares habían
estado muy bien adornadas/os, o que algunos vecinos no se habían implicado en
el arreglo… ¡¡¡En fin, lo de siempre!!!
He
escuchado desde que tengo uso de razón: [Tres
jueves hay en el año que relucen más que el sol: Jueves Santo, Corpus Christi y
el día de la Ascensión.]
Con
el paso de los años se fastidió ese mensaje… ¿Por qué?
Porque
en España los políticos decidieron
que dejara de ser festivo el Corpus,
fue en 1989, y la Iglesia se adaptó
a ellos, para lo que cambió su tradición y trasladó la solemnidad litúrgica de
ese día al domingo siguiente. No obstante, y por lo arraigado de su celebración,
en Toledo y Granada ese jueves sí sigue reluciendo más que el sol.
¿Estuvo
correcta la decisión de pasar la celebración al domingo?
A
mi entender no. Opino así porque debió de adaptarse a sus fieles, planteándoles
un horario en el que se conciliaran el respeto a las leyes, el trabajo y la
religión. Las cosas de Dios deben ser inamovibles, las de los hombres no.
Si
nos fijamos en las noticias publicadas sobre la celebración de Toledo comprobaremos que incluyen varios
temas pero, sobre todo, dan un resalte especial a la Custodia: [La Custodia
de Enrique de Arfe es una gran joya
de la fe, la que ya pudieron disfrutar los jóvenes de todo el mundo en las JMJ de Madrid. Consta su conjunto de 183
kg de plata y 18 kg de oro, 5.600 piezas sujetas con 12.500 tornillos y 260
esculturas. Una obra de arte para custodiar el Cuerpo de Cristo y que todos puedan venerarlo.].
También
habla el artículo de que hubo una amplia participación ciudadana, además, las
autoridades políticas y militares… ¿Qué lechuga
hacían los políticos y los militares allí, y los últimos atabiados con sus
mejores trajes de gala y el pecho con un empedrado de medallas?
¿Esta es nuestra fe?
Pues
debe ser, porque esta es la cera que arde en nuestra Iglesia y no nos podemos
quejar porque todos tenemos la culpa de que todo siga como estaba y cuando no
abordamos cambios y asumimos más responsabilidades.
Digo
lo anterior apoyado en el artículo 16,3
de la Constitución Española: [Ninguna confesión tendrá carácter estatal.
Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad
española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la
Iglesia católica y las demás confesiones.]
Yo
comparto totalmente este artículo y por eso creo que no mantener la festividad del Corpus fue un acierto político. Con quienes entra en escena mi
disconformidad es con los dirigentes eclesiales y es bien sencillo mi
argumento. Los políticos delimitaron
los campos pero la Iglesia cuando no
siguió con su tradición de celebrarlo en JUEVES
y, a mi entender, porque no legisló alguna norma que garantizara esa
independencia en los actos religiosos. Como no lo hizo pues los políticos nacionales y locales siguen acudiendo a los templos o a las procesiones, pueden hacerlo como cristianos, pero no debería ser en representación del estamento oficial para
el que fueron elegidos por los ciudadanos. Ellos, la mayoría, lo hacen para
ganar VOTOS cuando la ocasión lo
requiere. Tenemos el ejemplo de Toledo
y podríamos extrapolarlo a todos los pueblos y ciudades de España.
Siempre
escuché que la procesión por excelencia era la del Corpús, pero la realidad me demuestra que “una cosa es predicar y otra dar trigo”. Opino así porque en Toledo se celebró con los elementos humanos
que, a mi entender, nunca debieron de estar presentes: los políticos y los
militares. También me hace meditar el hecho de que Jesús saliera en procesión en una obra de orfebrería valiosísima, cuando
sus actos fueron un ejemplo de sencillez y pobreza. Si Él tuvo como cuna un
pesebre… ¿Por qué esa ostentación en
unos tiempos en los que las estrecheces económicas agobian a muchas familias?
Ahora
vamos a ofrecer, en fotos, algunas imágenes del Corpus en nuestro pueblo:
1.-
Recorrimos algunas calles antes de llegar al Paseo y lo hicimos empezando por
el final del recorrido oficial, este era el aspecto de algunas de ellas:
a) Antonio Machado
b)
Ramón y Cajal
c) Dr. Sagaz
2.- En el altillo que hay en el Paseo
para las actuaciones artísticas estuvo el altar y sobre él se celebró la
Eucaristía:
3.-
Una vez concluida la procesión inició su recorrido oficial:
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