Colaboración de Jacinto Cobo Moreno
¿Han oído hablar de la “Retroactividad
Fotovoltaica”?
Son
unas palabrejas nada más que regulares pues, nada más leerlas, la cabeza se le
gira a uno para atrás. Sin embargo “desahucio”
sí nos suena más, debido a la coyuntura económica en que vivimos.
Voy
a intentar en este escrito hacer unos paralelismos entre ambas temáticas para
que nos ayuden a entender ciertas realidades.
En
la primera década del S. XXI empezó el boom de las energías renovables. La bonanza económica del momento hizo que los
gobiernos de Aznar, y posteriormente
los de Zapatero, aprobaran Reales
Decretos donde se fomentaba la instalación de parques solares fotovoltaicos.
En
el R.D. (Real Decreto) 661/2007, se primaba
la producción de energía eléctrica a partir de paneles fotovoltaicos pagando el KWh producido a 44 c€.
¡Esto era un pelotazo financiero! Las
inversiones tipo eran de 600.000 €, o sea, para plantas fotovoltaicas hasta 100 KWp de potencia instalada. Según
este R.D. , se pagarían los KWh producidos a 44 c€ durante los primeros 25
años, y a partir de ahí, a 35 c€. Haciendo números, y sabiendo la radiación
solar de la zona instalada, se podía calcular perfectamente en cuánto tiempo se
amortizaba esta inversión. En zonas favorables, como Andalucía, se amortizaba
la inversión en 10 años y en zonas menos favorables, como Navarra, se
amortizaba en 12 años, estos estudios ya incluían gastos de financiación
bancaria y demás. O sea, que cada 600.000 € de inversión producían anualmente
alrededor de 60.000 €, que equivaldría a pagar la inversión en 10 años,
quedándote otros 15 años de beneficio, es
decir, 900.000 €, amén de los beneficios que se producirían a partir de
los 25 años (47.000 € anuales).
¿Qué produjo esto?
Un
BOOM. Una vorágine de instalaciones
fotovoltaicas a diestro y siniestro hicieron que se instalaran en España, en un
año, más plantas fotovoltaicas que en todo el resto del mundo. La explicación
de lo que ocurrió estuvo en que este R.D. tenía una fecha de caducidad, Septiembre de 2008. Todas las plantas
fotovoltaicas tenían que estar acabadas antes de esa fecha. Y así se hizo. Todo
esto produjo un flujo masivo de inversiones hacia esta actividad procedente de
todos los sectores financieros (fondos de inversión extranjeros, ahorros de
particulares, empresas, etc). Hubo incluso gente que pidió el dinero prestado a
los bancos para invertirlos aquí (lo mismo que pasó en EE.UU. antes de crack
del 29, la gente pedía dinero a los bancos para invertirlos en bolsa).
Todo
esto estaba sustentado en el R.D.
661/2007 y en la credibilidad de un
país, España.
¿Qué paso a partir de 2008?
Una crisis económica mundial y,
particularmente, española de órdago (del carajo, como dirían los
sudamericanos). Durante los siguientes años, las primas a las instalaciones
fotovoltaicas fueron disminuyendo drásticamente, hasta quedarse en mucho menos
de 20 c€, pero se seguía respetando lo firmado en anteriores R.D’s, y pagando
las primas que se pactaron en su momento. Pero la crisis siguió avanzando y
avanzando, no pareciendo tener fin, y sucedió lo que no debió suceder. Primero
Zapatero, y posteriormente Rajoy, hicieron unos Reales Decretos tales, que
donde dijeron “digo” ahora dicen “Diego”. O sea, que donde se garantizó que
durante 25 años iban a pagar a 44 c€/KWh ahora no pagan ni la mitad. El ultimo
R.D. suscrito por el ministro Soria, deja un exiguo 20% de beneficio a las
instalaciones fotovoltaicas sobre el precio de tarifa del KWH, lo que no les da
ni para pagar los intereses bancarios. A esto se le llama RETROACTIVIDAD
FOTOVOLTAICA.
Todo
esto ha hecho que infinidad de familias hayan ido a la ruina y que la
credibilidad de un país, España, se haya ido al carajo. ¿Ustedes se imaginan lo
que pensaran aquellos fondos de inversión extranjeros, que con el dinero de sus
ahorradores hayan invertido en plantas fotovoltaicas en España? ¿Ustedes qué
pensarían si fuese su dinero el invertido?, ¿Verdad que se les puede decir “Hijos
de su Madre”?. En la economía moderna se basa todo en la CONFIANZA, o por lo
menos, eso es lo que nos dicen los que luego nos engañan. A España se le presta
el dinero en los mercados en función de la confianza que damos como país. A la
vista ha quedado… ¿Hasta cuanto subió la maldita “prima de riesgo” española? Todo eso fue debido a la confianza que
dábamos como país y una de las causas fue esto que estoy diciendo.
¿Ustedes,
si fuesen un fondo de inversión extranjero, invertirían más en este país basándose
en futuros reales decretos?
Esto
no sucede nada más que aquí y en cuatro países bananeros… ¡Qué poca vergüenza!
¡Qué bochorno más grande!
Ahora
les voy a poner un símil de lo que hace un banco con los que no pagan su
hipoteca, o sea, lo firmado por ambas partes.
Cuando
una familia compra un piso, firma una hipoteca a muchos años con el banco (vamos
a poner 25, como estos susodichos en los R.D.). Si por cualquier circunstancia,
cualquiera y no entremos en disquisiciones, no paga la hipoteca, o sea, lo
pactado y firmado en un documento ante notario, el banco ejecuta la misma. Es
decir, denuncia el contrato ante el juzgado y, como es de suponer, sucede que
te DESAHUCIA por impago o incumplimiento de contrato. Sin embargo, a éstos no
hay quien los desahucie ni justicia que nos ampare ante sus tropelías. Si
hubiese justicia, a España, por incumplimiento de contrato habría que desahuciarla,
y todas estas familias e inversores deberían de poder quedarse con sus bienes,
y es más, si con el bien desahuciado no se cubre el total de lo pactado en el
contrato, se les deberá seguir debiendo dinero hasta que salde la deuda o se
embargan los bienes de los avalistas (en este caso, de los españoles). Esto es
lo que hacen los bancos con los hipotecados, si con el desahucio del piso no se
cubre el total de la hipoteca firmada.
Gracias
a Dios, yo no soy uno de esos pequeños inversores.
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