Colaboración de Paco Pérez
Un
año más, nuestro pueblo ha sido fiel con la cita anual del “belenismo” y nuestros paisanos han
vuelto a montar los tradicionales “belenes
navideños”, conocidos también con otros nombres: misterios, pesebres y portales. Donde más enraizada está esta
tradición es en los países donde se habla español.
El
fundamento de esta costumbre religiosa
está en la representación del “nacimiento
de Jesús” durante los días de las fiestas de Navidad en las iglesias, las
casas, los comercios…
La construcción de los belenes forma parte de la
tradición católica. En los hogares, por ésta, montar un belén siempre fue,
y es, una actividad especial para los abuelos y los nietos, de manera especial
cuando están pequeños porque al crecer ya les preocupa más las cosas propias de
sus tiempos y éstas pasan para ellos a un segundo plano.
Todos
sabemos que ha llovido mucho desde que se celebró la primera Navidad con un “belén” para conmemorar el “nacimiento de Jesucristo”, fue en la
Nochebuena de 1223. San Francisco de
Asís celebró ese año una misa nocturna en una cueva próxima a la ermita de
Greccio (Italia); escenificó el “nacimiento”
basándose en lo esencial y por ello no
utilizó figuras ni miniaturas de objetos cotidianos, como hacemos en
nuestros días; tampoco empleó
personas pero sí utilizó animales, el
buey y la mula, y un “pesebre” sin
niño. Para hacerlo se apoyó en la tradición
cristiana, en los Evangelios
apócrifos y leyendo el texto de Isaías
1,3: [Conoce el buey a su dueño, y
el asno el pesebre de su amo. Israel no conoce, mi pueblo no discierne.].
Con
el paso de los años, lo que hizo San Francisco entonces; un acto totalmente
bíblico en el que recreó la escena original del “nacimiento” rodeándola de un ambiente pobre, usando elementos muy
parecidos al de Belén y sin utilizar las imágenes; propició que se popularizara
la instalación de belenes en las iglesias durante la Navidad pero no como él lo
hizo y sí con lo que Dios prohíbe, las IMÁGENES
de seres vivos.
El
Ayuntamiento de Villargordo, en 2015, ha fomentado el plano cultural de los
tradicionales “belenes” de Navidad
mediante un concurso.
La
parroquia, dentro del templo, ha mantenido la tradición y ha montado un
sencillo y austero “pesebre”:
Impulsado
por el Ayuntamiento, el amigo Juan
Moreno Moreno, conocido popularmente como Juanillo “el pintor”, ha colaborado en el montaje del “belén municipal” que hay instalado en una sala del Museo “Cerezo Moreno”
y mediante la aportación de elementos que él ha construido. Este año se ha mejorado
el formato y ha aumentado el número de ellos. Espero que les guste:
1.-
Vista general de Belén.
2.-
Los vecinos, un día laborable cualquiera, desarrollando sus distintas profesiones.
3.-
Lugar humilde donde nace Jesús.
4.-Los
magos, orientados por Herodes, van en busca de Jesús hasta Belén.
5.-
Finalmente, encuentran el lugar donde ha nacido el Salvador.
6.-
Un tiempo después Herodes se siente burlado por los magos y decreta la muerte
de los pequeños, así pensaba dar muerte al rey de los judíos.
Con
el paso de los años, esta ignominiosa matanza se recuerda el 28 de diciembre como el “Día de los Santos Inocentes”… ¿Es correcto que haya derivado este
recuerdo nefasto hasta quedar en un día apto para gastar bromas y reírse del
que pica en la “inocentada”?
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